Las voces de Carol, de Clara Peñalver.
Sinopsis:
El caso de Abril Zondervan conmociona a la opinión pública: la escritora de éxito internacional ha aparecido muerta, aparentemente sin signos de violencia, en su casa de Málaga. ¿Quién puede haberla asesinado, si es que realmente se trata de un homicidio?
La inspectora Carol Medina es la encargada de la investigación. Se toma demasiado en serio su trabajo y suele salirse del camino marcado. Quienes la conocen bien saben que su obsesiva labor policial es también una manera de no tener que enfrentarse a su caótica vida privada.
Cuando Carol descubre que Abril, diagnosticada de esquizofrenia, llevaba años sin medicarse, tiene que adentrarse en la fascinante cabeza de la víctima. La novelista era una «escuchadora de voces» que había aprendido a convertir la complejidad de su mente en un material literario de primera clase.
En una ciudad de Málaga que bajo su apariencia luminosa esconde un lado oscuro, Carol irá avanzando en la investigación de un caso lleno de aristas, giros y sorpresas, a lo largo de un thriller que arrastra al lector sin darle respiro hasta el inesperado desenlace de las últimas páginas.
Reseña:
Psicología y crimen
Se ha hecho esperar el regreso de Clara Peñalver pero ha merecido la pena, porque la autora sevillana afincada en Granada, meticulosa donde las haya, ha empleado todo este tiempo de manera magnífica para ofrecernos ahora una novela de procedimiento policial impecable, donde los métodos de las fuerzas del orden de Málaga están reflejados con una fidelidad como pocas veces podemos disfrutar en una obra. Vaya por delante ese mérito porque es uno de los puntos fuertes de la novela.
Pero obviamente no es el único, si fuera así no estaríamos hablando de Clara Peñalver. Hay un componente psicológico en la obra que nos adentra en la mente, un tanto atormentada, de Carol Medina, quien arrastra un episodio anterior que le provocó “tres muertes”, como ella misma indica, y cuyos detalles le evitamos ahora al lector porque debe encontrarlos leyendo estas páginas.
Hablamos de psicología porque sin ella sería muy difícil explicar esta trama, porque es necesario entrar también en la mente de Abril Zondervan, la escritora que aparece muerta y cuyo caso debe investigar Carol, en una especie de correspondencia empática porque acaso en esa comisaría no haya nadie más preparado que ella para entender a una víctima que, además, era una “escuchadora de voces”.
Y vamos llegando a otro punto destacable de la obra, esa dolencia, que no debería tratarse solo como una consecuencia de la esquizofrenia, puede controlarse, y de hecho la escritora fallecida llegó a aprender a convivir con unas voces que a su muerte a ratos parece que pasan a ser propiedad de Carol. De nuevo hemos de regresar a la palabra clave: empatía, palabra que le da a Carol Medina muchos enteros para sobrevivir y poder acercase a la resolución de un caso que se presenta enormemente complicado.
Recapitulando, tenemos a un personaje complejo, unos métodos policiales más que fidedignos, y una profundización psicológica importante. ¿Falta algo más? Naturalmente que sí, y la habilidad de Clara Peñalver sabe encontrarlo y mostrarlo desde el primer momento, ese algo no es ni más ni menos que el ambiente policial, con un superior un tanto tibio del que el lector no sabe bien qué opinar, y un compañero forzado para Carol, a quien ella misma apoda la Hiena, que es todo lo contrario a la inspectora y que precisamente por eso terminará por derribar un buen número de sus barreras. A ella le repele, pero Hernández es uno de esos personajes que se gana al lector apenas en un par de apariciones.
Que nadie se olvide del caso en sí, la muerte de Abril Zondervan esconde mucho más de lo que muestra, y establecerá conexiones con otros casos. Y para que la novela quede ya completa, hay cierto aspecto personal de Carol que anda flotando en el ambiente y que debe ser solucionado. Como se ve, un gran trabajo de Clara Peñalver, que no ha dejado nada al azar. Ahora toca que nosotros lo disfrutemos.
La autora:
Clara Peñalver nació en Sevilla el 23 de abril de 1983 y se considera muy afortunada por celebrar su cumpleaños el día del Libro. Es licenciada en Biología por la Universidad de Granada, ciudad en la que vive y de la que se declara fervientemente enamorada. Es autora de Sangre (Premio Mejor Escritora Novel en el Festival Imaginamálaga 2010) y de los libros que forman la serie de Ada Levy (Cómo matar una ninfa, El juego de los cementerios y La fractura del reloj de arena). También ha escrito La venganza de Ada, un relato corto protagonizado por esta intrépida detective, publicado en la edición digital de las dos primeras entregas de la serie. Además, con la editorial Beascoa, Clara publica una línea de libros muy diferente: la colección «Hoy estoy…», formada por títulos infantiles centrados en la creatividad y la inteligencia emocional. Asimismo, Clara Peñalver ha sido la presentadora, durante un par de temporadas, del programa sobre arte de RTVE La mitad invisible.
Texto: © Antonio Parra Sanz, 2018.